jueves, 30 de agosto de 2007

Adiós a la generación dorada

Lo recuerdo muy claro. Era el verano de 1999 y me tocaba cubrir a la selección mexicana que iría a los Universiada de Palma de Mallorca.
Pensé que era afortunado. Ante mí estaba el futuro del basquetbol mexicano. Se veía brillante. No exagero.
¿Quieren pruebas? El cinco inicial tenía de armador a Enrique Zuñiga, quien estaba jugando para la universidad de Grand Canyon, de tirador a José Escobedo, de UTEP, de delantero chico a Christyan Rìos, de Biola, de poder a Eduardo Nàjera, que seguía con Oklahoma y de centro a Horacio Llamas, de los soles de Phoenix.
De todos ellos, el màs viejo era Llamas con 26 años de edad.
En el torneo no decepcionaron. México se metió a la pelea por las medallas. En semifinales les tocò bailar con la màs fea o la màs favorecida, que era España.
Mèxico dio batalla ante unos españoles que tenían en ese equipo a tres futuros NBA´s (y campeones del mundo) en Juan Carlos Navarro, Josè Manuel Calderòn y Fran Vàzquez, pero el árbitro los jodió. Adiós medalla.
Hace cuatro años, en Puerto Rico, con básicamente ese mismo equipo, màs la incorporación de Omar Quintero, Mèxico venció al eventual campeón olímpico Argentina, le ganó a Brasil con Nenè y Barbosa, le dio pelea a EU, pero al final su récord de 4-4 los dejó sin posibilidades de aspirar siquiera al repechaje.
Antes de este torneo pensé que el equipo tenía una oportunidad. Nolan Richardson es un gran coach y su sistema parecía el adecuado para un equipo que ocho años después de Palma no se veía nada brillante. Sólo un NCAA en Hèctor Hernàndez. Un Llamas con sobrepeso (màs) y menos rodillas. No Nàjera, quien boicoteó al equipo por que quería un dinero que no se le podía dar.
Porque creí?
Porque Nàjera jugando para Mèxico hace màs daño que bien. Seamos claros, Nàjera ha estado en la NBA tantos años por que acepta un rol, que es jugar muy buena defensa y no reclamar por tiros.
En la selección, Nàjera olvida la defensa y quiere tirar 40 veces. No es buena combinación.
Porque en un torneo corto, los equipos no tienen el tiempo para prepararse para una defensa de presión toda la duela durante 40 minutos (o 48 como es en realidad)....
Porque pensé que Llamas, Zuñiga y Avila se matarían por ir a unos Olímpicos....
Me equivoqué.... No podría dar motivos del fracaso porque no vi los juegos y no puedo hacer un análisis en forma. Richardson dice que estaban cansados. Será?
Ahora lo que es un hecho es que Mèxico volvió a fracasar en su intento por ir a unos Olìmpicos y seguramente volverá a fracasar en cuatro y en ocho años màs. Tal vez en 12 y 16.
Dentro de cuatro años, Llamas tendrá 38 y a lo mejor irá arrastrando las piernas. Nàjera tendrá 34. Zuñiga 33.
Quién sigue? Quién podría ilusionarme?
Hèctor Hernàndez es un cuate con talento, pero no al nivel NBA. Gustavo Ayòn es un Nàjera en potencia físicamente, pero con mente chiquita que no lo dejará salir de la LNBP.
Quién màs?
Omar Quintero seguirá ahí, pero nada màs. Adam Parada tal vez por ahí haga un roster NBA, pero jugará menos que Llamas en su tiempo. Lorenzo Mata no tiene nivel NBA.
No hay de dónde.
No hay còmo.
El tiempo pasó y la selección que me ilusionó no volverá.
Tal vez fue lo mejor.
Ahora no cubro basquetbol y el fútbol me da de comer.
Los tiempos cambian para todos....

5 comentarios:

Esquina Caliente dijo...

Ya lo dijo el gordo: "Lo más decepcionante en mi carrera es ver que no haya unidad y organizacion en todos los niveles del basquetbol mexicano. Es por eso que no hemos podido progresar".
A título personal, coincido, no importa que tanto talento haya o deje de haber, tal vez nunca vea a la selección en un mundial o unos juegos olímpicos.

xosean dijo...

Mi estimado Truck, te lo dije antes de que empezara este preolímpico y tengo años diciéndotelo, en México no sabemos jugar basquetbol. Los mexicanos no sabemos saltar. Te lo dice el tipo que antes de que tú llegaras a Reforma cubrió basquetbol como fuente. El mismo tipo que vio el primer partido de un jugador mexicano en la NBA, el mismo que fue a ver a Ávila al Junior college y el que recibía el mismo coco wash del raterazazazazo de Roberto González, hablando de sus pupilos: "Está marranou, pero esta bien cabroun", o "este cabroun es el nuevo rodmeen, ya me dijo Magic que lo va a apoyiar. Magic es mi amigou, jugamos en MIchigan State, esta cabrroun". Lo siento por los que se ilusionan con nuestros jugadores tercermundistas, que si tienen algo de talento lo pierden tragando 100 alitas en una sentada (yo lo vi no me lo platicaron) o en manos de Toussaint, GLez y hasta Julio Ortiz que se meten el dinero que pone esa gallinita flaca que es nuestro baloncesto. Esos ladrones que ponen de taxistas a los jugadores y que hacen giras de 18 partidos en dos meses para meterse varo, pero no le pagan a Nájera son el cáncer de esto y lo que es peor, ahí seguirán por siempre.

Anónimo dijo...

Dicen que es conveniente quedarse con las cosas positivas de alguna experiencia vivida. La generación fue dorada, pero definitivamente la faltó brillar, tal vez porque no existió ese artesano que limpiara todas las cochinadas que se le iban pegando con el paso del tiempo y que impidieron que la generación reflejara con éxitos la cara de saberse ganadores. Ya no hay solución, sólo queda aceptar que hasta que el perro muera, la rabia terminará.

Juan Chayo

Esquina Caliente dijo...

Dos comentarios adicionales...
1.- En horabuena para los comentarios de Chayo y José Antonio, uno crítico, el otro poetico, pero ambos atiborrados de verdad.
2.- Citando al buen pete, cuando era pedote y no cristiano: "Lo más decepcionante de las decepciones, es que te decepcionan" (No, no invento, mi creatividad no da para tanto).

Alex06 dijo...

Pues lo lamentable es que, como buenos mexicanotes, empiecen a tambor batiente y después se confíen o echen la hueva, tú eres quien más le sabes a esto Charles y me quedo con tu análisis y es una pena que no pueda verse al Tri de basquet en Olímpicos